viernes, 4 de diciembre de 2009

Veteranos

Julia, linda Julita, la más linda de todo Floresta, varias veces le arrimé uno de mis tantos bochines furtivos, le asomé los pies por el catre para ver si acaso se le ocurría pegarse una vuelta por el segundo cordón del conurbano de mis ilusiones, y ni un centro me devolvió la muy Julia, todo nones era ella, y como conmigo era con todo el barrio, no se piense que era algo personal, que le juro que en cada zaguán le silbaban piropos de verano, y ella que se paseaba con su vestido de florcitas violetas y amarillas, ella que a cada paso dejaba un vago sin trinchera, de no creer, y se la quedó nomás el Tony, eterno vecino de Segurola y Juan B. Justo, tenía una Chevy verde, divina, y el loco la ponía a 120 y ni se sentía, hasta que un día copeteó hasta para convidar, y agarró una curva en Alberdi, se la dió contra una panadería a la que no le quedaron sanos ni los miñoncitos, y menos que menos salió bien el Tony, que casi se muere. El barrio le rezó a esas dos piernas, porque el Tony jugaba de cuatro en los Veteranos de All Boys, era de habilidoso, pero para cuando le dieron el alta, ya no sentía nada por debajo de la cintura. Julia, la Julia más linda de Floresta, se había quedado con un tipo sin piernas, sin ganas de tocarla, una Julia sin tardes de paseo por la plaza ni veranos en Ostende. Una Julia que seguía preciosa, y un Tony que vendió por chirolas lo poco que quedó de una Chevy verde, divina.-
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(imagen extraída de aquí)

1 comentario:

Verònica dijo...

Me pregunto hoy donde esta tu libro. Y creo que si la respuesta es que lo encuentro acà, en el espacio, en este blog... bueno, me resulta maravilloso pero me quedarè entonces acà yo con las ganas de ir en el bondi o sentarme en la plaza a leer pequeños relatos de alguien que no conozco ni rostro ni nombre, pero me llega. Y pasar las pàginas siempre es un ejercicio, al menos para mi, mucho màs disfrutable con la lectura. Extraño el aroma a hoja impresa cuando paso a leerte. Algun dia escribire sobre este tema de escritores anònimos y lecturas intocables màs allà de la mirada y lo interno, claro, eso si.
Què historia fuerte y bella y narrada de manera tan original èsta.
Muy Julia, eso me encantò.

Un abrazo.

Vero.